Blu sigue alejado del circuito de los murales, su dinero fácil y sus oscuras implicaciones. Sigue trabajando por su cuenta, involucrándose en proyectos muy comprometidos y de presupuesto cero.

Ayer publicaba esta obra producida en una fábrica ocupada de Ljubljana, Eslovenia, que está resistiendo fuertes intentos de desalojo.

Blu-Ljubljana-squat-2016