Fotografía de Jonathan Turton.

He hablado aquí ya varias veces de Bushwick, uno de los casos más sangrantes en la actual tendencia de gentrificación inducida mediante murales. En este barrio neoyorquino el proceso está siendo particularmente rápido, de forma que conviven en él la población entrante – personas con alto poder adquisitivo atraídas por la presencia de arte urbano y murales – con la saliente – personas empobrecidas que llevan décadas soportando el abandono institucional de la zona.

Esta situación hace que las rutas guiadas para ver arte urbano y murales, habituales en tantas ciudades, resulten allí particularmente escabrosas. Este es el argumento de un artículo publicado hace unos días por la revista norteamericana Dazed & Confused en su versión online.

Como sacan a relucir muchas personas en los interesantes comentarios al artículo (bajo el propio artículo y también aquí), este tipo de rutas guiadas a través de la pobreza ajena no son, por desgracia, nada nuevo.

‘Ghetto Tourism’: New York’s disturbing new trend.