Hace cinco años dirigí en Santander para la UIMP el seminario El graffiti como mapa psicogeográfico. Tuve el privilegio de contar con la presencia de Adam, Akay y Wermke Leinkauf, artistas poco visibles pero cuyos trabajos se cuentan sin duda entre el puñado de aportaciones más valiosas y respetadas de la escena.
La tesis del seminario postulaba que, para llegar a entender el graffiti, no conviene abordarlo como forma de pintura o caligrafía. Hay que estudiarlo como lo que es en esencia: un juego de acción y de exploración, uno más de los juegos contemporáneos que inventan usos mágicos del estéril y alienante paisaje urbano. Corrientes como el parkour, el urbex, el skate, o muchas otras.
En 2011 este argumento era relativamente nuevo, y resultaba muy necesario defenderlo. Hoy es un punto de vista bastante establecido en la academia. Si yo me ayudé de las ideas de la psicogeografía situacionista, otros análisis usan ideas equivalentes de Lefebvre, Foucault, o diversos otros pensadores de la segunda mitad del siglo XX.
Esta manera de enfocar el graffiti está calando también en los medios mayoritarios. Hace unos días el canal de televisión franco-alemán Arte publicó el documental City manifesto (Urban explorers en su versión en alemán), que aborda precisamente estas ideas. Estudia de forma paralela culturas contemporáneas como el graffiti, el parkour, el urbex, la modificación de vallas publicitarias, las carreras ciclistas urbanas ilegales, o las fiestas subterráneas clandestinas. Los argumentos se desgranan a través de abundantes declaraciones de sociólogos, urbanistas y artistas. Sobre todo del explorador y académico británico Bradley Garret, de quien hablamos hace poco.
City manifesto se ha publicado dividido en ocho breves capítulos. La división por capítulos no se corresponde exactamente con los temas tratados. La edición es ágil y abundan las imágenes espectaculares, de modo que la cinta resulta entretenida a pesar de su contenido teórico. La locución es en francés, con partes en inglés. Hay subtítulos en francés y en alemán.
Todas estas ideas son las que trataré el próximo día 18 en Valencia, en la charla de acceso libre que servirá para presentar la ruta guiada Guía contemplativa de Valencia, que celebraremos como parte de Poliniza Dos. La ruta es una puesta en práctica de estas ideas. Fue de hecho en Santander, como parte del seminario El graffiti como mapa psicogeográfico, cuando tuve por primera vez la oportunidad de dar forma a una de estas rutas. Las dos últimas se celebraron en Berlín y Barcelona respectivamente.
Aquí abajo están los ocho capítulos del documental con subtítulos en francés. Para verlo con subtítulos en alemán pulsa aquí. De nuevo, una estupenda aportación a la cultura de parte de Arte TV.
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